Tengo debilidad por los montajes de «belenes» y en estas fechas procuro hacer recorrido por todos los que puedo y a veces descubres auténticas sorpresas como la que he encontrado en el centro comercial Tres Aguas a las afueras de Madrid.El montaje es excepcional en todos sus aspectos pero donde me tocó la fibra fue en la reproducción tan fantástica de una antigua almazara de prensa con sus contrapesos y hasta el chorro de aceite cayendo en el pocillo. En la otra imagen se ve el despacho de venta situado en un habitáculo contiguo. Una manera muy didáctica para enseñar a los más pequeños (y grandes) la importancia que ha tenido y debe tener la elaboración de buenos oleocaldos.
Después una buena merienda de pan, tomate o mermelada, aceite de oliva virgen extra….¡eso sí que es un buen plan!